lunes, 27 de julio de 2015

Cómo rapear al estilo libre PARTE 1



Rapear al estilo libre requiere de una combinación única de habilidades de rima, vocabulario, carisma y presencia para salir adelante. Puede ser abrumador al principio, pero si sigues estos pasos sencillos podrás dominar el micrófono de una manera rápida.      
Escucha mucho rap de estilo libre. Los raps de estilo libre no escritos que vienen directamente de la cabeza del rapero probablemente sean más irregulares y más toscos que las canciones que has estado escuchando, pero también pueden ser más impredecibles y emocionantes. El estilo libre tiene su propia sensación y escuchar a otros raperos de estilo libre es una buena manera de aprender los trucos del oficio. 


Échale un vistazo a las batallas en vivo o a las competiciones si tu ciudad las ofrece. Esto también puede ser una buena manera de conocer a otros aspirantes a raperos y hacer conexiones.
YouTube es un gran recurso para ver varios videos de batallas de estilo libre de todas las épocas. Desde Notorious B.I.G rapeando en la esquina de una calle a los 17 años hasta las batallas clásicas de Eminem y un puñado de raperos no conocidos rapeando al estilo libre sobre la canción nueva de Kanye West. Todo es buen punto de partida.


Empieza con un ritmo. Consigue un ritmo sin vocales en línea o repite el instrumental de una canción que te guste en YouTube y deja que suene por un tiempo. Siente el ritmo. Si tienes un verso con rimas escrito, empieza por ahí o trata de escribir nuevas rimas a medida que escuchas el ritmo. Repítelo una y otra vez hasta que hayas empezado a tener una idea del ritmo de la canción y la manera en que tu flow se puede acoplar a él. No te preocupes si pierdes el ritmo al principio. 


 Empieza con el compás de entrada. La gran mayoría de música rap se escribe con un tipo de compás tradicional de cuatro por cuatro, también conocido como “compás cuaternario”. Esto significa que cada medida tendrá un compás de entrada fuerte al principio: UNO, dos, tres, cuatro, UNO, dos, tres, cuatro, etc. Empieza con este ritmo.
Por lo general, habrá espacios en blanco en las pistas en las cuales el rapero estará esperando para entrar. Si no tienes acceso a los instrumentales o a YouTube, puedes utilizar esos espacios para practicar.
Improvisa. Una vez que hayas sentido el ritmo y hayas agotado tus rimas, da unos cuantos pasos hacia el estilo libre. Repite una línea que hayas escrito, pero inventa una nueva rima para la segunda mitad de la misma.
No te preocupes si lo que dices no tiene sentido al principio. Estás tratando de tener una idea de cómo sentir el ritmo y hacer que tu mente cree rimas en el momento. De cualquier manera, nadie te escuchará.
Deja de pensar. Si piensas demasiado acerca de tu próxima línea, vas a equivocarte y confundirte con la siguiente línea. Practica dejando que tu mente fluya libremente de un pensamiento a otro. Los mejores raperos de estilo libre se sienten relajados y cómodos con los ritmos en donde están rapeando. Si parece que no se te ocurre nada, no trates de forzarlo. Escucha al ritmo y trata de escribir algunas rimas para empezar o prueba con otro ritmo.
Enciérrate en tu dormitorio, sótano o garaje. Nadie más tiene que escuchar tus prácticas si no lo quieres. Invierte el tiempo necesario para asegurarte de que tu debut sea aún más espectacular.
Sigue adelante. Incluso si cometes un error, entrénate para seguir adelante. Si tartamudeas una o dos palabras, di algo como “¿Acaso tartamudeé? Es un pequeño traspié”. El rap es como la comedia: la coordinación de del tiempo lo es todo.
Los raperos de estilo libre profesionales por lo general tienen líneas de apoyo, las cuales sirven como esos extintores de incendios que están dentro de una caja roja empotrada en la pared y se usan en caso de emergencia. Esta es una línea o una frase que utilizas cuando no puedes pensar en otra cosa y necesitas ganas algo de tiempo para recuperarte. Mientras mejor te vuelvas en el estilo libre, más pequeñas serán las frases. Los raperos de estilo libre realmente buenos usan una muletilla como “Yo” o “De hecho”. Con el tiempo, tu muletilla de apoyo será algo que puedes empezar a decir sin darte cuenta.

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